El tema de este capítulo es la relación entre nuestras acciones en este mundo y nuestra situación en el mundo venidero. Nos preguntaremos por qué la Torá describe cada recompensa a nuestras acciones puramente en términos de este mundo, llegando a la conclusión que nuestro lugar en Olam HaBá no es otro que nuestro lugar en el Olam HaZé.